Cinco Tipos de Personajes (Y Porque Apestarían en el Mundo Real)

La diferencia entre la realidad y la ficción es que, bueno, la ficción debe tener sentido. Y no es extraño encariñarse con ciertos arquetipos o estilos de personajes de la ficción porque apelan a algo interno que no podemos encontrar en el mundo real: dinero, poder, belleza...

Montar un dragón por los fiordos de Noruega... díganme que no soy el único con esa fantasía.

Pero analizando bien, hay ciertos personajes y personalidades que por más atractivas que sean en el reino de la ficción (tengo que patentar ese termino) serían un dolor de muelas (y de gónadas) tratar con ellos y ellas en la vida diaria.

Por eso mismo, aquí les presento mi conteo de cinco estilos y arquetipos geniales en la ficción, pero el por qué darían más de una jaqueca a uno en la realidad. No abogo con que se dejen de hacer, pero mi objetivo es analizar la razón por la cuál no caerían tan bien si te los toparas en frente.

5. La Tsundere

De una vez lo aclaro: odio las Tsunderes; para mi, son el personaje más trillado y gastado de la ficción japonesa y aunque entiendo que está bien que un personaje tenga conflictos de personalidad y pueda pasar de la alegría a la ira, en el caso de la Tsundere se ha exagerado a lo que parecen ser seres con PMS sempiterno.

Para quien no sepa que son, básicamente se trata de personajes femeninos duros y hostiles por fuera pero tiernos y con enormes inseguridades por dentro...y a eso añade esteroides y sociopatía.

No tanto, pero casi.

Es decir, claro, todos tenemos matices: no podemos estar felices, estar deprimidos, estar pensativos todo el tiempo, pero la mayoría de las personas funcionales tenemos un controlcito interno que ayuda a dominar nuestras emociones, o al menos, a esperar a desahogarlas en el momento indicado...la Tsundere no, y que va, no sólo no se siente mal sino que parece querer mostrar con orgullo su bonito carácter.

Dicen que los hombres las preferimos cabronas...no, lo siento: yo prefiero alguien que no lastime mi integridad física, gracias.

¿Cómo no enamorarse de eso?

4. El Sarcástico Sabelotodo

El siguiente arquetipo me costó entenderlo porque... básicamente yo QUERÍA ser uno.Y lo intenté, y fue...doloroso.

Fue en mi época como fan de Placebo, así que en general, fue un tiempo de vergüenzas varias.

Éste tipo de personajes, como Daria de la serie homónima, Jeffrey de "El Principe de Bel Air", Calamardo de Bob Esponja y prácticamente todo personaje escrito por Joss Whedon, tienen grandes lineas (o simplemente, las mejores lineas), y en un mundo de locos es difícil NO ponerse de su lado.

Pero quizá porque ya soy un adulto (ir)responsable, y al ver esas actitudes, me doy cuenta de lo adolescente que son: ¿cómo soportar estar con alguien que no puede hallar el lado amable (o al menos, no tan jodido) de la situación? Es como si ellos pensaran que no supiéramos lo chingado que esta el mundo o como si fueran los únicos que supieran alguna gran verdad o revelación.

Ahora se juntan en lugares así

Y la arrogancia: una diferencia entre los sarcásticos de la ficción y aquellos de la vida real es que al menos los inventados no se auto-proclaman "sarcásticos": pensar que por mostrarte así eres ingenioso y divertido sólo te hace lucir arrogante, y a menos que te llames Robert Dawney Junior, la arrogancia no va contigo.

No usted señor Dawney...usted sea lo que quiera.

Quizá me "vendí", quizá deje mi alma ser aplastada por la vida real, pero sólo sé que lidiar con un adolescente así, consideraría enviar una propuesta de ley al congreso para re-introducir la conscripción en los menores de edad.

3. La "Manic Pixie Dream Girl"

Ya había tenido la oportunidad de hablar un poco de este arquetipo: para los que se lo perdieron, hablo de esas lindas chicas excéntricas de comportamiento raro y gustos extraños que en su apariencia de ingenuidad y locura guardan grandes secretos de la vida y vienen la salpícar de nueva vitalidad la vida de los hombres a quienes conocen.

Y no me malinterpreten: Zooey Deschannel (quién prácticamente definió este personaje en los últimos años) me parece tan linda y adorable como siempre, pero analicemos las cosas bien: las "Manic Pixie Dream Girls" no son personajes profundos, sólo una fantasía masculina de que una linda chica fuera de lo común (porque estas mujeres NUNCA son algo menos que modelos con lentes gruesos y camisas de Talking Heads) venga a quererte sin importar lo aburrido que seas y te arregle la vida en poco tiempo. Poco de distinto tienen con el estereotipo de las rubias bobas: muñecas agradables a la vista pero sin nada que aportar en realidad.

¿Qué grandes ideas nos estará ocultando?

Pero dejando las implicaciones machistas escondidas de lado, hay algo más: hay casos de adolescentes, pero en general, estos personajes son mujeres adultas, y llega cierta edad en la que quieras o no, debes madurar, y aunque hay siempre espacio para la excentricidad, hay diferencia entre ver caricaturas a tus 30 años o a simplemente no saber como jodidos funciona el mundo.

"Creo que hoy quiero ser desactivadora de bombas en Irak"

En todo caso, esos comportamientos me hacen pensar que las que necesitan que sus vidas sean arregladas, son ellas en realidad, lo cuál es, curioso: "New Girl", una serie de precisamente la Santa Patrona de las Manic Pixie Dream Girls, trata un poco sobre eso, así que parece que ya muchos nos hemos dado cuenta de la verdad: no por usar lentes de pasta gruesa y escuchar a "The Smiths" te hace saber más de la vida.

2. El Patán con Corazón de Oro

Fantasía casi universal, es decir, sólo piensen: puedes ser grosero y traicionero pero si te redimes en los últimos minutos, ¡ya eres bueno! ¡Y todos te perdonan y te aman! ¡Viva!

"Porque no es un tan mal compañero, porque no es un tan mal compañero, porque no es un tan mal compañero...¡Y NADIE LO PUEDE NEGAR!"

Pero tal atractivo no se sostiene en la vida real, y es que aunque un patán con corazón de oro es mejor que un patán a secas, en ciertos contextos es de hecho peor: no puedes contar con personajes así, sencillamente es imposible. Necesitamos constancia de las personas, y alguien que puede o no ser un traidor o puede o no hacer un detalle mono por ti no la provee: es como apostar en un casino, sólo que en vez de dinero, la apuesta es tu cordura.

Perdí, por cierto.

Y si no lo creen, sólo imaginen compartir algún aspecto de su vida con Homero Simpson: gracioso al principio, pero poco a poco desesperante.

Los fans de Los Simpson sabrán de qué hablo.

1. El "Héroe Ingenuo" (O francamente estúpido)

No hay que ser un genio para hacer lo correcto, o para saber la diferencia entre el bien y el mal. Pero algo sucedió en el reino de la ficción, en el que parece ser que en muchas, MUCHAS series y obras el destino del mundo tiene que recaer en las manos de alguien con la capacidad mental de una comadreja muerta...

O...de un aficionado a la televisión.

Puedo vivir con héroes que no son físicos nucleares, pero, ¿imaginan el destino del mundo, o digamos, al menos de una nación dependiendo de un completo imbécil?

Inserte chiste políticamente relevante

¿Tengo que mencionar la horrible lección que deja al público? "Pensar es malo, actuar a lo pendejo es bueno". No pido doctorados, pero quizá una estrategia o algún plan de vez en vez sea efectivo, y es que comprendo que todos queremos ver ganar al "underdog", pero cuando se trata de que cosas importantes, creo que lo mejor es dejar que el que tenga algo de sesos se encargue de la situación mientras le da alguna distracción a los idiotas que quieren meter mano en algo delicado y peligroso.

"A ver Naruto, esto se llama balero..."